viernes, 30 de octubre de 2009

Calaverita

El día de los muertos se había quedado hasta bien llegada la mañana-
aplicando Libernómina el empleado que responde al nombre de Manuel Magaña-
cuando por sorpresa recibió la visita de la muerte con todo y su guadaña…
-“¡Insensato! ¿Qué haces trabajando mientras deberías estar descansando la pestaña?”
Preguntó la huesuda mientras se mostraba arrebatada…
-“Aquí sacando la chamba”, contestó Manuelito con un nudo en las entrañas…
Con gesto despectivo después le dijo la calaca: “No me agradan los de tu calaña”
-“Que en lugar de recordar a los muertitos en su morada…
…Se ponen a trabajar desde bien entrada la madrugada”.
-“Mejor te llevo pa’ que te encuentres con tus difuntitos,
al fin y al cabo el paso a la muerte dura solo unos minutitos”…
-“No me lleves flaquita”, suplicó Manuel llorando hasta las lagañas;
-“Te prometo hacer un altar a mis muertitos y rezarles sin mucha maña”.
-“¡No trates de convencerme con tal patraña!
¡Que ya te eché el ojo y no te salvarán tus artimañas!”
-Dijo la muerte mientras preparaba su parca.
Al otro día los compañeros hallaron muerto a Manuelito sin sospechar su hazaña,
encontraron su cadáver patas pa’ arriba, tal y como se mueren las arañas.

miércoles, 14 de octubre de 2009

El piso blanco y la pantera negra

Pues ahí estaba yo, solo en una especie de zoológico en el cual sólo existía el color blanco; había blanco por todas partes y aparentemente nadie alrededor; no recuerdo si grité y pregunté algo y mucho menos si alguien me respondió… Sólo trataba de ubicarme en aquel extraño lugar, cuando de repente caí en la cuenta de que también me encontraba en una jaula de vidrio; un enorme cubo cuya área resultaba extremadamente complicado medir, pues como les comentaba, el fondo del lugar era blanco, lo que incluso hacía difícil distinguir el arriba del abajo, la derecha de la izquierda. No estaba atemorizado, pero sí extrañado de encontrarme en semejante lugar, y más aún como una especie de prisionero.

Recuerdo haber mantenido la vista fija en lo que parecía una puerta al otro lado de la jaula, cuando caí en cuenta que no estaba solo en el encierro; había también ahí una imponente pantera tan negra como las mismas profundidades y con sus penetrantes ojos amarillos puestos sobre mí. Me sentí enormemente amenazado y me asusté por supuesto; y entonces el felino enjaulado junto conmigo, sintiendo mi temor y nerviosismo comenzó a merodearme inquietamente, justo como lo haría cualquier fiera dispuesta a cazar en el ilusoriamente reducido espacio de una celda de cristal.

Después de rodearme varias veces, finalmente la pantera decidió atacarme pero con la gentileza de no causar demasiado daño, solamente me mordió el brazo derecho. Aunque la mordedura, según recuerdo no me causó dolor físico yo permanecía pávido y cohibido ante la situación aún cuando después de la embestida, la pantera se retiró a un rincón… Probablemente sólo quería advertirme de su presencia, o quizá simplemente estaba defendiendo su territorio en aquel obtuso lugar, o factiblemente lo que ocurrió ahí es el símbolo de algo a lo que hay que temer.

martes, 13 de octubre de 2009

Martes

A lo mejor ni se den cuenta, pero la fuerza detrás de cierto designio revolotea in tempestuosa y éste no es definitivamente el tiempo de aflojerarse. Esta semana ha sido un mar en calma, pero hoy precisamente no me pasaron inadvertidas las malas intenciones y la atención negativa de cierta personita hambrienta de la presencia y motivación de los demás para que las cosas le sucedan. Ya entiendo por qué los lastres y las malas vibras rodean permanentemente a alguno que otro.

Así es, esa persona que se dice "cercana" ha sido bastante poco cooperativa y muy egoísta pero yo no me culpo por ello; no tengo por qué solidarizarme con semejante conducta y formarle nubes negras a mi mar en calma de esta semana. Y es que las responsabilidades adicionales y prolijamente innecesarias crearon el martes cierta distracción que me obliga a reconocer dónde residen las verdaderas lealtades. Aunque me dio la impresión de perder el tiempo en intentos de avanzar, no me desesperé, fue simplemente un mal día.

Realmente necesito hacer una pausa de las presiones de la insistencia para que este fin de semana pueda dedicarme a crear un espacio (que no tenía) de aquello que me pone nervioso. Las cosas saldrán de acuerdo a lo planeado.

miércoles, 12 de agosto de 2009

Una lección para los zorros

El último día de la primavera, la madre zorra habría de expulsar a sus dos hijos ya adolescentes de la madriguera, según la tradición de los mamíferos. Antes de darles el adiós definitivo los abrazó y les dijo:

—Hijitos míos, lo que voy a hacer me parte el alma, pero así es la ley de la naturaleza y ha de acatarse. Hoy deben apartarse de mi lado y aprender a vivir por su cuenta. Les he enseñado cómo cazar, cómo resguardarse del frío y cómo mantenerse a salvo del peligro; pero antes de que se vayan necesito que asimilen una lección más: El mundo es cruel y no tiene lugar para los débiles; si no son capaces de cuidar de sí mismos a partir de este momento, no les garantizo su supervivencia allá afuera.

Nunca se den el lujo de tener un momento de debilidad, ya que por desgracia, en ese momento podrá venir un depredador y despojarlos de cuanto pueda, incluso la vida. Es difícil y tantas veces injusto; pero no me pregunten por qué.

He de decirles también que allá afuera, llegará el momento en el que tampoco podrán confiar ciegamente en nadie, en nadie, ni siquiera entre ustedes porque hasta los hermanos pueden traicionarse por comida, una madriguera o por una pareja.

Deben saber también que nunca podrán pasear libremente por el territorio de otros zorros y que la envidia es inherente a la naturaleza de nosotros. Anden siempre con cautela y estén atentos al acecho de un depredador; la confianza es sólo momentánea y conveniente a la vigilia.

Por último, tengan siempre presente en momentos de soledad y asilamiento que todos los seres vivos nacemos solos y morimos solos.

Habiendo terminado de enseñar la última lección sus hijos, la madre los besó y escoltó a la puerta, donde les pidió que se alejaran sin voltear y cuando estuvieron los suficientemente lejos, ella desapareció para siempre de ese hogar. En un principio los dos zorros decidieron mantenerse unidos, pero al cabo de la estación más fría y con menos alimento se separaron y por suerte no volvieron a encontrarse jamás.

domingo, 19 de julio de 2009

En busca de...

Las cosas últimamente han resultado patéticas, pero, no del todo inesperadas; y es que cuando te preguntas por qué razón el destino se ensaña con algunas personas poniéndoles pruebas que parecen imposibles de superar y que las circunstancias tienden a empeorar antes de mejorar, te das cuenta que la cacería por la felicidad es un círculo que termina y vuelve a empezar.

Habremos de comenzar y finalizar el círculo tantas veces, como dure el ciclo mismo de la vida. Al cuestionar por qué un curso no puede quedar estático en el punto que consideramos "el más alto" en ese momento, se torna tan difícil mantener viva esa chispita que nos da los ánimos de seguir adelante y que se llama esperanza, la cual nace cual débil como la flama de un cerillo y muere tan efímeramente que parece sólo un suspiro.
Esa esperanza que con el caminar de los meses y luego años se transforma en una espera que lejos de seguir siendo alentadora se vuelve inútil y frustradora. Cuando todas las luces empiezan a apagarse y son tan pocas las que se encienden; siempre recuerdo lo que la serpiente le dijo a Eva: -"No puedes confiar en nadie".


No sé decirles si ya pasaron sus pruebas; pero si las dificultades persisten, entonces me hace pensar que no, pero si es lo contrario, entonces tampoco sabría explicarles el por qyé permanecen detenidos y no logran cerrar el círculo en el que se encuentran ahora, pero no tener en este momento las respuestas es tan alentador como tenerlas porque por un lado sabrìan qué esperar y por el otro el anhelo alimenta como un poderoso combustible el motor de la búsqueda.

lunes, 29 de junio de 2009

Unas hojas sueltas

Estoy esperando ahora, porque estoy esperando el cómo… Denme el revés porque este encierro ya me está dando comezón y los que están aquí se la pasan actuando como idiotas; además la gigantesca tarea de buscar una nueva palabra para una devota madre ya parece inalcanzable.
Cuando la sal se mezcla con el lodo, el aletargado sabor ya no puede mantenernos despiertos, lo que nos obliga a estar dando vueltas sobre nuestros propios pies. La sequedad del aire alimenta a las rocas y las vuelve más fuertes que el orgullo.
Al combinarse la lluvia con los ojos, se genera una tormenta que dura más de 28 horas, durante las cuales los campos aprovechan para dar sus frutos y las praderas para reverdecer. Los pájaros se refugian en sus nidos y los felinos salen a jugar…

martes, 9 de junio de 2009

El día más significativo de tu vida, es el más importante

Estimada amiga:


Quiero, por este conducto enviarte una atenta felicitación, te veías preciosa en tu vestido de novia, blanco y adornado por las que ahora son ilusiones y que con el tiempo se transformarán en usanzas de lo que creíste pudo haber sido el último tren.

Si eres feliz en estos momentos, yo como tu amigo te acompaño en tu felicidad, aunque no puedo evitar sentirme algo decepcionado… Pero de la gente promedio, sólo pueden esperarse cosas promedio.
Antes y ahora entendía tu búsqueda… pero en este preciso momento, más que nunca la justifico, pero eso no oculta que el hueco que tenías fue lleno con cosas equivalentes o semejantes y verás que el tiempo las volverá cacharros que terminarán siendo basura y nuevamente querrás llenar el vacío; entonces comenzarás otra búsqueda.
Amiga, esta es tu historia, tú la has hecho; de eso puedes estar segura y feliz y te congratulo por no tener miedo a equivocarte y ser optimista a pesar de tu carácter. Quién puede mostrar lo que hay en el camino, las personas que encontrarás, lo que te hará feliz o las dificultades que tengas que enfrentar… Sólo el tiempo; espéralo y cuenta conmigo hasta donde pueda.


Leunam

jueves, 21 de mayo de 2009

A tan sólo diez días del estuario

Ya pienso estar harto de escuchar esos gritos desesperados, casi poéticos en su futilidad y siempre preguntando cuánto puede punzar este camino a partir de este momento. Creo que todavía quedan mil razones para que te rindas ante todo, pero sigues berreando que alcanzarás agua en el estuario, y yo insisto en que en tan sólo diez días se agotará para siempre.

La sed y la desesperación te habrán hecho cambiar un poco, pero los zapatos son los mismos y por eso creo poder adivinar el desenlace de todo esto; porque aunque esta historia me resulta totalmente nueva, me parece que son fragmentos de otros cuentos que ya conozco y si miras hacia abajo, encontrarás las huellas de otros que ya van muy adelante de ti.


No malinterpretes mis intenciones, aunque mis palabras parezcan rudas y pienses que sólo quiero verte morir porque estoy fastidiado de tus esperanzas y motivaciones, sólo quiero hacerte comprender que no debes tener miedo de llegar al otro lado… No sabemos qué define a todo lo que hay en este mundo, pero sí sabemos que su naturaleza es temporal, ¿entonces de qué tienes miedo? Por favor comprende que aunque logres llegar al estuario y saciar tu sed por días, no le habrás ganado del todo al tiempo y que tarde o temprano, algún día abrirá sus fauces y te engullirá, igual que a mí.

lunes, 11 de mayo de 2009

Pausa/Continúe


¡Qué necesaria es una pausa! Sobre todo si esto puede ayudar a salvar tu vida aunque no te percates de ello. Recuerda que tus maestros te lo han dicho: Manuel, es importante que sepas cuándo parar temporalmente y cuando en definitiva porque las señales son sutiles y a veces confusas; pero esta vez lo has hecho muy bien. El ciclo debe continuar, con o sin nosotros.


No me gusta mucho retomar el hilo de lo que había dejado; ya fuese por desinterés, por convicción o por impaciencia; pero hay cosas que no puedo abandonar inconclusas, aunque me desagrade la idea y me irrite en idear cómo reinventarlas o por lo menos darles otro enfoque… Pero aquí estoy, de vuelta, porque alguien me enseñó valiosamente que no se puede reversar el flujo del destino, sólo lidiarlo.

miércoles, 4 de febrero de 2009

¿Qué hacer si cae en un laberinto?

Laberintos en nuestro universo hay muchos, los hay negros, los hay blancos; también de vidrio, también de concreto. Existen algunos muy extensos, otros no tanto… Algunos son circulares y cuadrados; de dimensiones anchas, de dimensiones angostas; completamente oscuros o demasiado iluminados; incluso algunos de oro sólido en contraste con otros de arcilla y lodo. Independiente de la forma y figura todos representan tres puestos: una entrada, una dificultad y una salida. Seguramente habrá quienes entren y salgan sin mucha dificultad, de igual manera quienes salgan con mucha dificultad o incluso hasta quienes ni siquiera logren salir. Ya sea por error o por decreto del destino, si usted llegase a caer en un laberinto; aquí le brindo algunas recomendaciones que pudiesen resultarle útiles:

Antes que nada, no pierda la calma y créase que su estadía en el laberinto será momentánea; de otra manera su memoria a largo plazo no podrá retener por mucho tiempo los mapas de los caminos que ya haya trazado o vaya descubriendo en el trayecto.

Avance, no tema equivocarse y trate de marcar de alguna forma por dónde ya ha pasado y verifique si hay atajos para llegar al último punto en el que esté.

Use sus instintos y trate de agudizar su inteligencia espacial, o sea la capacidad de ubicarse cardinalmente en un punto; en otras palabras, el sentido de orientación.

Si uno o varios caminos recurrentes que haya estado siguiendo no lo llevan a ningún lado o lo regresan al mismo sitio de partida, deje de usarlos y busque nuevos. Recuerde que su experiencia y aprendizaje son sus mejores armas.

No se desespere, Roma no se hizo en un día… La paciencia no es sólo una virtud de los reptiles.

Busque señales de aire fresco o de luz y sígalos, pueden significar que la salida está cerca.

No haga trampa. La mayoría de los laberintos tienen guardianes y cuando se percatan de acciones fulleras lo pueden castigar severamente. Si busca el camino correctamente, no tiene nada que temer y le aseguro que recibirá su recompensa.

Puede ser que llegue a encontrar una o más personas en el mismo laberinto; le aconsejo que se apoye de ellas siempre y cuando le aporten pistas o compartan sus propias experiencias; pero por ningún motivo se aferre a ellas, acuérdese que el pez grande se come al chico.

La verdad es que no existe una guía completa, ni mucho menos confiable del todo sobre cómo trazar caminos para cruzar un laberinto. Aún con una vista aérea es difícil en algunas ocasiones.

La última recomendación es que tampoco trate de jalar a terceros al laberinto en el que esté usted; recuerde que las reglas no lo permiten y sancionan severamente a quien lo haga.

lunes, 19 de enero de 2009

El tiempo que estamos despiertos

Otra vez sonó el despertador y pasmosamente Sara no logra abrir sus ojos luego de otra larga noche sin conciliar el sueño y es que el mundo que la está esperando desde las 7:00 AM no parece convencerla del todo pero tampoco le permitirá seguir durmiendo media hora más, pues según el programa del día ya es tarde; ya debía estar en la regadera. De mala gana avienta la cobija, desconecta el reloj y se dirige a paso lento al baño, pues necesita agua fría para acabar de despertar. -¿Qué día es hoy? se pregunta, -¿Martes o miércoles? si todos los días de semana inglesa son iguales a excepción de la ropa de trabajo. Cierto, es martes, hoy le toca vestir el uniforme gris con blusa azul.

Con el tiempo encima, Sara se apresuró lo más que pudo y logró salr con sólo 10 minutos de retraso de su casa con destino a su centro de trabajo. La noche anterior no pudo dormir bien, aunque se acostó cansada, el sueño profundo tardó demasiado en llegar; así que en trayecto al trabajo estaba somnolienta. Mientras viajaba en el taxi, le vinieron a la mente algunos fragmentos de lo que parecía había soñado unas horas antes... Era como una fiesta de cumpleaños donde todos vestían de verde, lograba verse a sí misma que también vestía de ese color.


Divagó un momento sobre su sueño pero después empezó a cuestionarse sobre la causa del insomnio que no la deja descansar bien desde hacía unos meses. AL parecer todo estaba bien, no creía que fuese alguna preocupación familiar, pues todos estaban muy bien, salvo la operación en la rodilla de su madre programada para febrero; tampoco creía que fuera tensión por el trabajo, pues en estos momentos todo estaba muy bien también y en su vida personal tampoco estaba atravesando por ninguna cuestión difícil.


Llegó a su trabajo y el resto del día estuvo para Sara bastante relajado; pero nuevamente esa noche no logró dormir bien. Pasaron y pasaron las semanas y ella seguía con el mismo problema; consultó a un especialista médico en trastornos de sueño y tampoco pudo encontrar una causa de la falta de sueño y por ende no pudo recetar ningún medicamento para ello.


-¿Qué será lo que le pasa a Sara? Será que el problema no es perceptible ni para ella misma que cree no tener ningún problema porque todos los aspectos que integran su vida, a pesar de ser estables ya son rutinarios y aburridos. Podría ser que en el tiempo que estamos despiertos el alma de Sara grita desesperadamente pidiendo un cambio significativo, una avnetura o por lo menos una vuelta al rededor del mundo para no sentirse entre cuatro paredes. Yo pienso que es eso y sé que continuará, pues Sara no tiene el valor de desear un cambio de dirección por el confort que le da lo que posee actualmente. ¡Lástima! Es lo que sucede cuando un alma aventurera está dentro de un cuerpo conformista.

domingo, 4 de enero de 2009

Mil espejos rotos

Un fuerte grito que se escucha en la distancia, quizá en el segundo o tercer piso... las cortinas cubren las ventanas y no permiten la vista hacia el interior; por eso nadie se percata del asedio silencioso detrás de la urbanidad. La armonía doméstica es sólo la farsa del espejismo de su matrimonio y allá afuera el mundo entero sin sospecharlo.

Y mientras más observo a través de sus verdaderos "yo" más siento como si me estrellara contra 1000 espejos rotos y entre miles de fragmentos que lo reflejan todo, es imposible ocultarse; no hay donde esconderse. Y mientras afuera las luces brillantes de una ciudad no son capaces de opacar lo que se vive dentro. Aunque tema más que a nada salir de esta habitación y ver los 1000 espejos rotos, creo que ya es hora... Amando a su hijos con pasión, protegiéndolos a cualquier costo, aceptando sólo el curso de la acción; me temo que ya se acabaron los puentes que cruzar. ¿Quiénes son los culpables? ¿Quiénes son quienes tendrás que reparar las gruesas cicatrices? Porque no debemos dejar a nuestros hermanos sangrando... Y ya es hora.

sábado, 3 de enero de 2009

Mensaje de Año Nuevo

¡Saludos! Aquí rápida y brevemente para desearles un feliz 2009; que seamos realistas, no será del todo feliz, porque forzosamente debe traer una que otra cosa mala y sin sabores; pero si lo miramos objetivamente así son todos. Así que mi mejor deseo es que las alegrías sean mayores que las tristezas; que la salud sea mayor a la enfermedad; que la abundancia sea mayor a la pobreza y en general que todo lo bueno sea mucho mayor que lo malo.

Me llegó un mensaje, que me gustaría compartir con aquellos que leen este blog (que creo que sólo son dos o tres personas). Espero que les guste, omitiré el nombre de quien lo escribió porque no estoy seguro que sea 100% de su autoría, así que lo dejo sólo en las iniciales, ahí les va:


Feliz inicio

Hay años tan bellos, que los sentimos pasar por el corazón... Son años cargados de alegrías... de esperanzas... Son años que al recordarlos nos hacen sentir más jóvenes... Son años que no pesan, al contrario pasan tan rápido que quisiéramos detenerlos pues en cada vivencia nos encontramos sonrientes, felices...
Hay años que nos hacen sentir sin fuerzas, que nos debilitan y que deseamos que terminen muy pronto... Son años tristes, quizás con marcadas ausencias, quizás con un adiós que quedó grabado a fuego en la memoria, o tal vez con perdidas tan grandes que hasta nos hacen sentir que estamos perdidos navegando sin rumbo... Son años en los que pesa el dolor, la angustia, y en los que duele el pecho y un "nudo aprieta la garganta..."
Hay años que por ser tan lindos guardamos como un tesoro el almanaque para recordarlos siempre...
Hay años que preferimos arrancar el almanaque para poder olvidar...

No sé cómo fue tu año, solo quiero desearte que este próximo sea mucho mejor...
Solos o acompañados quiero que sepan que estaré brindando por ustedes en la distancia, por su felicidad, por sus logros y por sus sueños...

La vida no es fácil, a veces, cuesta enfrentar al dolor, cuesta mucho decir adiós a quien amamos, cuesta hoy ver en la cena lugares que nunca pensamos que podrían estar vacíos, cuesta enfrentar la enfermedad y muchas veces nos cuesta aun más volver a comenzar, volver a levantarnos...
Pero la vida continua y nunca sabemos qué hay detrás de tantas emociones, de tantos sentimientos, de tantas vivencias... Solo debemos apostar con fe y esperanza a un futuro mejor, a una vida mejor...
Por eso levanto mi copa y brindo por ustedes, deseando que cada burbuja explote y los salpique con amor, salud, prosperidad, paz, felicidad y todo lo lindo que se merecen…

Pongo toda mi fuerza en este deseo de hoy y de corazón, les deseo que este próximo año sea uno de los mejores años en el que con entusiasmo logren alcanzar todas sus metas, deseos y sueños...


MARG