Parte I:
No me importa que opines que mi extraño mundo no es perfecto; ni tampoco me interesa que el tuyo esté en demacrada decadencia y ahora vivas entre las ruinas. ¡¿Qué te hace pensar que puedo necesitar una p*ta como tú?!
Simple y sencillamente ya no me importa, porque mi decoro me llama; anteriormente pasé por alto tantas faltas y esta vez estoy ansioso por dar vuelta a la siguiente página. Después de todo, la vida misma es una novela: Entran y salen personajes, unos tienen impacto en el desarrollo de la historia, otros no. Así que supongo que esto significa que ya no somos amigos, esto siempre estuvo en el guión. Los que no han aprendido de la historia están condenados a repetirla.
Parte II:
Hoy me convertí en ese puntapié que te manda a la ch*ngada, rueda colina abajo y sé que mientras vayas cayendo tratarás de usar la lengua como freno, pero será inútil, sólo tragarás tierra y piedras; mejor ciérrala, te puedes ahogar. Es seguro que ya no te veré merodeando, así que pregúntale a tu ego que siente y quien va a pagar por los daños, porque yo sé que el seguro no cubrirá esto. ¡¿Ya terminaste de rodar?! ¿Terminó por fin la avería? Ya lo ves, no pudiste escapar, era imposible: Todos tus demonios, púdrete con todos tus demonios. Y yo mientras ¿A qué me he dedicado? Bueno, ayer planté algunos árboles y hoy ya son abetos; mañana tendrán frondosas ramas que servirán de hogar a las aves.
No me importa que opines que mi extraño mundo no es perfecto; ni tampoco me interesa que el tuyo esté en demacrada decadencia y ahora vivas entre las ruinas. ¡¿Qué te hace pensar que puedo necesitar una p*ta como tú?!
Simple y sencillamente ya no me importa, porque mi decoro me llama; anteriormente pasé por alto tantas faltas y esta vez estoy ansioso por dar vuelta a la siguiente página. Después de todo, la vida misma es una novela: Entran y salen personajes, unos tienen impacto en el desarrollo de la historia, otros no. Así que supongo que esto significa que ya no somos amigos, esto siempre estuvo en el guión. Los que no han aprendido de la historia están condenados a repetirla.
Parte II:
Hoy me convertí en ese puntapié que te manda a la ch*ngada, rueda colina abajo y sé que mientras vayas cayendo tratarás de usar la lengua como freno, pero será inútil, sólo tragarás tierra y piedras; mejor ciérrala, te puedes ahogar. Es seguro que ya no te veré merodeando, así que pregúntale a tu ego que siente y quien va a pagar por los daños, porque yo sé que el seguro no cubrirá esto. ¡¿Ya terminaste de rodar?! ¿Terminó por fin la avería? Ya lo ves, no pudiste escapar, era imposible: Todos tus demonios, púdrete con todos tus demonios. Y yo mientras ¿A qué me he dedicado? Bueno, ayer planté algunos árboles y hoy ya son abetos; mañana tendrán frondosas ramas que servirán de hogar a las aves.
